Cueva del Lago (Ayora)

[12.05.2013] También conocida como la Cueva del Pozo del Tío Vidal. Se encuentra al oeste de Ayora, en el paraje natural de La Hunde. El acceso termina en pista forestal en un excelente estado para cualquier tipo de turismo. Desde donde dejamos el coche hasta el acceso a la cueva, son menos de 5min caminando. El acceso es a pie, tenemos un tramo totalmente horizontal en el que encontramos dos columnas. Será normal ver murciélagos revoloteando todo el tiempo. Al final se encuentra el hueco en la roca que da acceso a la sima. Estrecho pero no en exceso. Como siempre pasa en estos casos, tendremos muchas más dificultades para salir que para entrar. Nos encontramos con una repisa donde nos podemos acomodar , y hacemos el segundo fraccionamiento para iniciar la bajada. Es un pozo de 12 metros aprox, que nos da acceso directo al fantástico lago subterráneo que da nombre a esta cueva. El lago no siendo muy extenso, tampoco es nada pequeño, y el agua muy cristalina de color turquesa. El techo está plagado de estalactitas muy finas. Pero sin duda, las mejores formaciones están rodeando al lago, y son de destacar las que se encuentran en la parte izquierda. Desde la parte derecha, se puede acceder al fondo del lago (enfrente desde donde hemos bajado). Para ello se puede instalar un pasamanos, si no queremos correr el riesgo de mojarnos, y bastará pasarlo asegurándonos con nuestro cabo largo o el del puño. La profundidad puede llegar al menos a los 8m en algunas zonas, según vi en una topografía. El goteo desde el techo es constante, y hay unos puntos precisamente muy cerca de la orilla en la parte derecha, que el efecto sonoro es casi como el de un grifo muy mal cerrado. Mención especial para los HUEVOS FRITOS: los de calcita son iguales salvo que no los podemos comer :) El agua es tan tan limpia, que el lago hace de ESPEJO de toda la sala y viceversa. Incluso en las paredes y el techo, podremos observar cómo se reflejan y viajan las ondas que se forman en el lago, consecuencia del goteo. El lago en su orilla, refleja perfectamente todas las formaciones, el efecto visual es mágico. Justo a la derecha del punto por donde hemos hecho el descenso, se abre una gatera que da acceso a otra sala más pequeña y que contiene otro lago mucho más pequeño. Para pasar esta gatera, tendremos que quitarnos todo el equipo, incluyendo el casco. Realmente la parte estrecha es de un metro, pero no hay forma de pasar si no es así, y el cuerpo perfectamente pegado al suelo y sin levantar la cabeza. El techo de esta sala es de una belleza superior a la sala grande. Nos arrastraremos sin más remedio sobre un pequeño gour con agua, por lo que el mono se quedará mojado por la parte delantera (conviene pasar boca abajo). Estalactitas y banderas muy muy finas y coloridas. Estupendo apagar los frontales, para quedarnos en la más absoluta oscuridad y silencio, salvo el pequeño goteo. Debido a la fuerte humedad y el tamaño de esta sala, el efecto visual es como estar en una sauna. Una cueva para disfrutar pasando las horas muertas o sacando fotografías, y de la que saldremos más mojados de lo habitual, sobre todo si decidimos pasar la gatera, o no instalar pasamanos ;) La calidad de algunas fotos no son buenas, y por supuesto para nada hacen justicia a lo que se ve ahí. Si me pasan dentro de unas semanas otras mejores, las cambiaré. A la vuelta se puede parar en un merendero para comer.