José Luis Cuesta Saldaña - Españoles en Estados Unidos (sitios de interés)
Descripción del sitio
Ciudad de origen Madrid
Vive en: Miami, Florida
Llegada a EEUU: 6 de febrero de 2011
Edad: 28
Profesión: Editor de vídeo y postproductor para Discovery Communications
Su historia: En 2010, a pesar de la crisis, tenía trabajo, me iba a casar con mi mujer y, tras ahorrar 3 años, nos habíamos comprado la casa en la que queríamos vivir. Estábamos cumpliendo el círculo vital del ser humano, tal y como hicieron nuestros padres años atrás. Pero la compañía para la que trabajaba cerró, luego abrió de nuevo, me volvieron a ofrecer un contrato pero no me podían subir el sueldo (no había tenido una subida en 2 años) y el tema pintaba muy mal. La decisión era difícil, y el tiempo corto: ¿seguir igual, con el mismo trabajo sin expectativas de futuro, o arriesgarse a dar el salto y probarme a mí mismo?
Mi madre es Puertorriqueña, así que mis hermanos y yo tenemos la nacionalidad Estadounidense, aunque no hubiéramos vivido nunca en este país. Ellos, mis hermanos, ya llevaban dos años en este país y les había funcionado. Sólo quedaba yo. En Enero del 2011 dejé mi trabajo después de 4 años, me despedí de mis compañeros, de mis jefes y de mis amigos. Preparé unas semanas el viaje, y en Febrero dejé la casa que estaba destinada a ser mi hogar y dejé a mi mujer pensando que si no lo intentábamos, nunca íbamos a saber hasta dónde podía llegar
Mi peregrinación me ha llevado 9 meses, pero ha sido fructífera. Después del año más duro y más enriquecedor de mi vida, he encontrado trabajo en Discovery Communications en Miami, con unas condiciones y un sueldo que en España son de ciencia ficción. No es que me paguen un dineral, es que me pagan lo que vale mi trabajo, y me dan oportunidades que en España no hay desde hace muchos años. Sin embargo, esto me ha costado casi todas mis amistades en Madrid y estar separado de mi mujer. Ella está ahora conmigo, pero sólo temporalmente, hasta que encontremos la forma de poder reunirnos de nuevo a un lado u otro del Atlántico. Ahora ella está embarazada, y no sabemos si el niño nacerá español o americano. Esta separación me parte el alma, pero hasta que encontremos una solución es lo que hay.
Mirando hacia atrás me doy cuenta de que lo que ocurre en España es un mal endémico, algo peor de lo que nos creemos y que no sabemos identificar. EEUU es un gran país, con sus pecados y sus defectos, pero que cree en sí mismo y en su progreso, y en el valor del trabajo. Con todos los sindicatos, patronales, convenios, enchufados y demás parafernalia burocrática sólo hemos conseguido crear un dinosaurio que no nos deja ir ni hacia delante ni hacia atrás. Estamos condenados hasta que hagamos un estudio serio de nosotros mismos, nos demos cuenta de nuestros problemas e intentemos cambiar de mentalidad. Porque en el fondo ése es el problema: nuestra mentalidad. Lo más nimio y lo más difícil de cambiar. Por mi parte, me encantaría volver. Pero no a esta España, sino a otra en la que el trabajo tiene el valor que se merece, y no el que se le da. Cuando ése día llegue, entonces me plantearé volver a la cultura que pertenezco y a la que quiero, pero por ahora tengo que ser pragmático, pensar con la cabeza fría y aguantarme la rabia por sentir que he tenido que irme por la puerta de atrás."