Desde que lo descubrí me parece un lugar mágico rodeado de una muralla que incluye uno de los monasterios románicos mejor conservado de nuestro país. Además por el pueblo transita el camino norte de Santiago. En su albergue se alojan numerosos peregrinos y que convierten al pueblo en una animosa mixtura de culturas. Carballos, castaños, hayas, nogales conforman un paisaje ya conocido en "el bosque animado"